Our Shared Scenario es un proyecto para la exploración de nuevos espacios comunes de interacción.
Su intención es vincular grupos distintos de participantes, situados en lugares distintos del planeta y a través de de internet
En este caso, la conexión no se realizaría entre personas ancladas a su asiento delante de un monitor de ordenador, si no que la tecnología de las comunicaciones se utilizaría para establecer una ventana a la cual ambos grupos pudieran asomarse, conocerse y desarrollar juntos la tarea creativa planteada en este proyecto, a través de la interacción plenamente inmersiva y en tiempo real que la telepresencia permite.
La parte más representativa de todo ello puede parecer ser la fase performática, donde los participantes se convertirán en actores que darán expresividad con todo su cuerpo a los dibujos que habrán obtenido en una fase anterior. Sin embargo, esta será tan solo la cristalización de un proceso previo, de un laboratorio relacional destinado a establecer las bases para que la complicidad entre ambos grupos sea una realidad, y de esta manera dar respuesta a toda una serie de preguntas:
¿Dónde empieza el reconocimiento del otro cómo un igual?
¿Qué hará falta para sentir la presencia del otro más allá de lo corpóreo?
¿Es la corporeidad una condición para que se establezca un respeto mutuo o es posible establecer otras formas de presencia que los niños sientan como plenamente válidas?
El arte es el camino idóneo para dar respuesta a estas preguntas, cuestiones fundamentales para un mejor entendimiento de la época en la que los adultos estamos entrando, pero en la que los niños han nacido ya inmersos. Es de ellos, por lo tanto, de quién mejor podemos buscar respuestas.
El proyecto, realizado en colaboración con Enric Socias, se realizó gracias a una residencia artística en Mediaestruch, Sabadell, y la experiencia piloto se reañizó en conjunto entre éste espacio y el Medialab Prado, en Madrid.